Desbloquea la Selva

Crecí en Austin, no bajo atardeceres, sino bajo el rugido de jaguares y tambores de medianoche. Mi padre me enseñó disciplina; mi tesis en Berkeley me enseñó a escuchar el ritmo en el caos. Hoy diseño juegos donde los animales no son NPC: son ecos de nuestros instintos primitivos. Cada semana pruebo sistemas que convierten RNG (Generador Número Aleatorio) en algo sagrado: no suerte, sino patrón. RTP (Retorno al Jugador) no es una métrica: es el pulso de un tigre que avanza por un bosque digital. Cuando desbloqueas la Clave del Bosque, no ganas recompensas: recuerdas quién eras antes del algoritmo.